Estimulación del Apetito por medio del uso de los ácidos orgánicos

Acidos orgánicos

La estimulación del apetito en mamíferos como en aves, se lleva a cabo por complejos mecanismos reflejos, químicos, físicos y hormonales que aún no terminan de comprenderse y entre los que están, aquellos generados nivel del estómago como producto, de la estimulación que producen sobre la mucosa gástrica especialmente
los aminoácidos, péptidos y ácidos los cuales, inducen la liberación de gastrina que su vez, estimula las células parietales para que produzcan ácido clorhídrico (HCl).

La presencia de ácido en el estómago induce la liberación de jugo gástrico, el cual contiene pepsinógeno, una proenzima que en presencia de un bajo pH (2 – 3.5) se activa en pepsina, enzima proteolítica que inicia la digestión de las proteínas a nivel estomacal en péptidos y aminoácidos. De modo general la inclusión de acidificantes en la dieta o en el agua de bebida de aves, cerdo o conejos, estimula el apetito haciendo que el consumo de alimento se mejore.

Importancia de la Acidificación del agua de bebida

Las dietas alimenticias modernas que se suministran a cerdos y aves, están diseñadas para que los animales obtengan tasas de crecimiento altas. Son muy ricas en proteínas por lo que su digestión exige mayor esfuerzo del organismo animal, además que la cantidad de ácido gástrico no siempre es la suficiente, para la lograr la digestión de las proteínas del alimento.

Cerdos:

Los animales en sus primeros días de vida, no tienen completamente funcional su aparato digestivo, por lo que las dietas pueden presentar problemas en su aprovechamiento y al contrario, es común la presentación de diarrea. De modo particular esta situación se presenta en cerdos, en los cuales durante sus primeras cinco semanas de vida, no se produce la cantidad suficiente de Acido Clorhídrico (HCl) (Easter, 1988) lo que ocasiona problemas digestivos frecuentes, ya que no tienen la capacidad de digerir adecuadamente las proteínas de las dietas de pre iniciación e iniciación. De alguna manera esta deficiencia la suple el ácido láctico, generado a partir de la fermentación de la leche materna en los animales lactantes, pero en cerditos destetados la situación se agrava, ya que al estar privados del suministro de la leche de la cerda, tienen que enfrentar solos la digestión de los alimentos balanceados, a una edad en que todavía no tienen del todo en función el sistema de producción de HCl.

Recordemos que una de las principales funciones del HCl, es hacer que el pepsinógeno se transforme en pepsina, para que pueda tener lugar la hidrólisis de proteína en el estómago. A su vez los productos originados en la
actividad de esta enzima estimulan, la liberación de enzimas del páncreas como tripsina, y carboxipeptidasa a nivel del duodeno, para continuar con el metabolismo de las proteínas ingeridas. La acidez proveniente del estómago estimula la secreción de bicarbonato que tiene como función, regular el pH tan bajo del quimo o bolo
alimenticio. Otra función de vital importancia que se cumple, ante la presencia de la acidez del estómago mediada por la secreción de HCl, es intervenir en la absorción de minerales como el calcio y el magnesio y en la transformación del hierro de su forma férrica a ferrosa, proceso sin el cual es imposible su absorción a nivel intestinal.

La inclusión de acidificantes en las dietas o en el agua bebida, durante las primeras semanas de vida en los lechones y en especial en las etapas posteriores al destete, hasta las 6 semanas, contribuye de modo importante en la digestión y utilización más eficiente de los alimentos, con mejores rendimientos de peso, menor incidencia de
diarreas y mortalidad como producto, de la acidificación de tracto gastrointestinal (TGI) que favorece el establecimiento de una flora microbiana benéfica, que conlleva a una Eubiosis limitante del desarrollo de la microflora patógena, representada por enterobacterias como Salmonellas, E. Coli, Clostridium que proliferan y contribuyen en el incremento del pH intestinal como producto, de fermentaciones indeseables de
los alimentos, que ocasionan cantidades altas de amoniaco.

Se sabe que las dietas altas en proteína ya sea de origen animal o vegetal, así como los minerales, tienen
tendencia a incrementar el pH del TGI, debido a su capacidad tampón que hace resistencia al efecto acidificante de los jugos gástricos. Esta situación se presenta mayormente con ingredientes como la soya, la harina de pescado, el carbonato de calcio, el fosfato bicálcico y óxido de Zinc.

Aves y Pollos de engorde:

En las aves al igual que en los cerdos el empleo de acidificantes, tiene similar importancia y es de especial interés en los pollitos de pocos días de nacidos, que no tienen su aparato digestivo completamente funcional y presentan los mismos problemas con la utilización de las dietas balanceadas. Particularmente en las aves de postura se ha demostrado, que el mantenimiento de un pH adecuadamente ácido a nivel del TGI, ya sea bajo condiciones fisiológicas normales o mediante la adición de acidificantes, mejora la disponibilidad de minerales como el calcio y el magnesio.

Gallinas ponedoras:

Se sabe que en gallinas ponedoras en condiciones de altas temperaturas ambientales, los niveles séricos de
minerales como el calcio, el magnesio y el sodio se ven disminuidos
. Extensos estudios documentados han encontrado, que en pollos como en aves de postura bajo condiciones de estrés calórico, el empleo de acidificantes reduce de modo importante la mortalidad, debido a que en estos periodos se presenta alcalosis metabólica por la excesiva pérdida de CO2 como producto del jadeo excesivo. La utilización de acidificantes en estos periodos contribuye en la restitución del balance acido-básico del organismo.

Conejos:

En conejos que son alimentados mayoritariamente con forrajes y en menor proporción con concentrados, que incluyen niveles importantes de fibras de origen vegetal, la acidificación es importante también, ya que del mismo modo que en aves y cerdos un pH intestinal ácido, contribuye en la proliferación de la flora benéfica, en la digestión de la celulosa, la proteína y el mantenimiento de una función cecal apropiada y una eficiente cecotrofia, vital en la nutrición de esta especie. La alteración de la microflora cecal como producto de cambios en la dieta por desbalances en la proteína y la fibra, contribuyen a la alcalinización de los ciegos, con el consiguiente crecimiento de microorganismos como E. coli y Clostridium, que causan diarrea y mortalidad. La acidificación del agua de bebida (pH sobre 4) de los conejos durante la crianza y de modo permanente, contribuye a lograr la acidez cecal y a mantener la fisiología digestiva (N. Bassan, S. Roma, 2007).

Por qué usar acidificantes como el Acivet en el agua de bebida

Acivet es una mezcla de ácidos orgánicos que permite una adecuada acidificación del agua de bebida, hasta el pH necesario para que pueda tener el efecto fisiológico que se busca cuando se usa un acidificante. Estimula el apetito y ayuda al mantenimiento de la sanidad intestinal al limitar el crecimiento de la flora patógena.

Acidificante recomendado Acivet

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